Las paredes de barrera de viento cumplen una función muy similar a las paredes rompevientos, pero pueden ser más robustas en su estructura. Están destinadas a proteger áreas particulares de vientos fuertes y pueden ser útiles en situaciones urbanas donde la velocidad del viento alrededor de los edificios se reduce, en campos agrícolas para proteger los cultivos, y a lo largo de las carreteras para aumentar la supervivencia del tráfico. Las paredes son útiles para controlar el flujo de viento en un área, haciendo que sea más cómodo y seguro. Generalmente están hechas de materiales duros que son duraderos y pueden resistir condiciones climáticas adversas. Además de ser funcionales, están diseñadas para verse bien.